Libro, Flores artificiales[LS]

El escritor Luiz Ruffato recibe correspondencia de un extraño en su casa. Es un manuscrito, una recopilación de recuerdos que Dório Finetto, un alto funcionario del Banco Mundial, escribió a partir de sus numerosos viajes de trabajo. Como consultor de proyectos en el área de infraestructura, Finetto viajó por medio mundo en una sucesión de simposios, reuniones y congresos. La mente del ingeniero, sin embargo, esconde un observador astuto y sensible, una de esas personas capaces de integrarse con naturalidad en un grupo de desconocidos. De Beirut a La Habana, pasando por Hamburgo, Timor Oriental, Buenos Aires e innumerables lugares del mundo, Finetto recopiló grandes historias y pequeños acontecimientos. Era tan capaz de integrarse en la vida local como de saber el momento exacto en el que era prudente mantenerse alejado y no involucrarse. Por unos momentos, fue parte de la vida de estas personas. En otros, fue protagonista involuntario de un drama ajeno. A veces observaba estas realidades casi como desde un periscopio. A partir de estas observaciones, Finetto compuso sus Viagens à terra alheia, el manuscrito que envió a su compatriota Luiz Ruffato. Y es este libro dentro del libro el que Ruffato transformará en la novela Flores Artificiales. Partiendo de un esqueleto ficticio, Ruffato –el autor, y no el personaje en sí– desdibujará los límites entre ficción y realidad, sin perder nunca de vista la fuerza literaria que es la gran seña de identidad de su obra.