Libro, Fascista en el sofá, Uno[LS]

La obra aborda la disputa entre dos tendencias: una concepción racionalista comprometida con las libertades y el pensamiento democrático representada por el psicoanalista y una concepción irracional propia de la creciente personalidad autoritaria en la sociedad brasileña representada por el personaje fascista. La obra pretende mostrar que mientras la intelectualidad se limita a ridiculizar y menospreciar al fascismo, este crece entre la población. Es un duelo en el que el personaje del psicoanalista está destinado a perder en un momento de empobrecimiento de la subjetividad. Además de la tragedia y el drama, la propuesta es que el espectador note y se asuste por su simpatía por el fascista. El carácter del psicoanalista muestra la fragilidad de la conciencia y la ingenuidad del intelectual frente al fascismo y sus esfuerzos de resistencia. El psicoanalista (como la sociedad ilustrada) encuentra primero al fascista, que llega a su consulta, un tipo tosco e inofensivo, un poco divertido, y luego se da cuenta del peligro que corre. Comienza como profesoral y didáctico y se vuelve irónico; Poco a poco se va sintiendo asustada. Empieza siendo una persona de buen carácter y luego se vuelve cada vez más cínico. El tono de su discurso es el de un sinvergüenza, que cautiva al público y siempre resulta algo autoritario. En varios momentos mezcla convicción con libertinaje. Es un poco estúpido y bastante convencido. Hay notas afectadas en su forma de hablar. Al principio adopta una postura típicamente lacaniana, luego se vuelve más libertina y finalmente llega a la desesperación. Se trata de enfrentar ese “elemento de desesperación” que se esconde ante lo que viene sucediendo en Brasil.