Libro, Diarios de Virginia Woolf, Os: Diario 1 (1915-1918)[LS]

Este es el primer volumen de un diario que Virginia Woolf llevó, con algunas pausas, durante 44 años, desde su adolescencia hasta pocos días después de su muerte. Experimentado como una escritura interminable, el diario de Virginia Woolf representa su anhelo por un sistema capaz de incluirlo todo, sin distinciones: lo bajo y lo sublime, lo público y lo privado. En el primer volumen, esta mujer de 33 años, recién casada y aún no publicada, continúa escribiendo un proyecto de diario que había interrumpido al final de su adolescencia. Las lagunas son una de las principales características de este comienzo. El deseo de utilizar el diario como base para consolidarse como escritora se ve obstaculizado ahora por dos crisis mentales que sufrió, primero en 1913 –y de las que apenas se había recuperado en 1915, cuando comienza el volumen–, y luego un mes y medio después. media después después de iniciarlo. Virginia sigue encontrando, con gran dificultad, su voz literaria y una forma para su diario. Hasta 1919 adoptaría el rostro que adoptaría en años posteriores, englobando a veces en el mismo párrafo comentarios domésticos, análisis literarios y acontecimientos de la época, trivialidades y extractos de extrema belleza: la aridez de la vida cotidiana al lado del cuestionamiento. del espíritu. Gran lectora del género que es y con un proyecto muy claro para su diario, Virginia lo aleja del estereotipo de texto confesional y lo transforma en un campo de pruebas para sus experimentos, utilizándolo sobre todo para observar siempre: el mundo, los demás y, en particular, ella misma. Así, lo que vemos a lo largo de sus cientos de páginas no es el retrato consolidado de una “única” Virginia Woolf, sino el registro de un cambio constante. Cuando se abre este volumen, Virginia y Leonard, que se casaron en 1912, viven en Richmond, una ciudad cercana a Londres. Leonard suele leer el diario al principio, a petición de la propia Virginia. Está a punto de publicar su primera novela, The Voyage Out, y el hecho de que sólo la mencione una vez no significa que no haya sido motivo de angustia: a menudo en su diario trata indirectamente los acontecimientos más impactantes de su vida. Se supone que la expectativa por esta publicación fue uno de los detonantes de su segundo desplome.